Propuesta. ¿Se dañó? Con Cambios 2 final. Con cambios 3 no va más. ¡FUNCIONA!
Resumen
Cuando me pidieron escribir un artículo sobre mi aprendizaje en la ingeniería de papel, francamente no sabía por dónde empezar. Mientras me movilizaba de la universidad a la casa, empecé a recordar mi transcurso por la academia y colegio buscando una idea para empezar a escribir. Con aquellos recuerdos yo no paraba de reír solo, irremediablemente la gente se extrañaba de verme en una actitud jocosa, los pasajeros habrían de pensar que tengo un problema mental, y una solución creativa para evitar la marginación social fue ponerme los audífonos, recordar mi infancia, y entablar una conversación conmigo, preguntándome lo siguiente:
¿Por qué me gusta hacer libros Pop Up y desarrollar mis proyectos universitarios con ingeniería de papel?
Como respuesta histórica a la anterior pregunta, recuerdo aquel oxidado gusto escolar por ir a la biblioteca en la hora de descanso, me gustaba ver libros ilustrados de biología y periódicos, sus coloridas historietas de la última página lograban sacarme una sonrisa en aquel solitario lugar. Para este tiempo recolectaba: volantes, afiches, revistas y libros para luego “descuartizarlos”, mis favoritos eran los catálogos turísticos y las revistas de “Los Testigos de Jehová”, allí encontraba una gran riqueza de recursos gráficos para crear mundos e historias. Recortaba siluetas y realizaba collage. Entre recorte y siluetas armaba historias, algunas enredadas y otras perturbadoras, no era muy armónico usar figuras religiosas y fusionarlas con estampillas de Dragon Ball Z.
URI
2463-1302
http://revia.areandina.edu.co/ojs/index.php/ASD/article/view/1083/930
https://digitk.areandina.edu.co/handle/areandina/3378
https://doi.org/10.33132/24631302.1083
http://repositorios.rumbo.edu.co/handle/123456789/149285